Quizás mucha gente sabe acerca de la filosofía india de Osho, pero pocos entienden realmente lo que se basa en la enseñanza desarrollada por el "Maestro iluminado" Bagwan Rajneesh.
Osho era un maestro, un indio iluminado. Muchos también lo conocieron bajo el nombre de Bagwan Sri Rajneesh. Cerca de 25 años habló con sus alumnos, y los materiales de estas conversaciones, los aforismos de Osho, sus creencias y puntos de vista fueron inmortalizados en libros, que luego se distribuyeron por todo el mundo, fueron traducidos a docenas de otros idiomas.
La vida como un camino hacia la iluminación.
Osho nació en diciembre de 1931 en 1931. Desde temprana edad estuvo interesado en las enseñanzas espirituales, buscó conocer su cuerpo y alma, para explorar sus habilidades. El joven maestro probó diferentes caminos hacia la iluminación, se dedicó a la meditación, pero al mismo tiempo condenó severamente los prejuicios sociales, no quería creer en las religiones y acatar sus reglas.
Quizás lo más sorprendente es la alegría del maestro. Enseñó a la gente a no tomarse la vida demasiado en serio y reírse más.
Osho creía que cualquier acción podría conducir a un resultado rápido. Para él, el propósito del hombre en la vida se consideraba importante. Defendió su propia opinión y se la enseñó a otros, enseñó a sus seguidores a confiar solo en su opinión.
El maestro dijo que cada persona es única, y su personalidad solo puede revelarse en el proceso de la vida, solo por prueba y error puede descubrir qué es lo correcto para usted y qué no.
Dios es amor
Asociaba a Dios con el amor, teniendo en cuenta que el amor puede llegar a todos de la forma más inesperada, pero debe ser aceptado.
Osho amaba la vida, lo consideraba un secreto que no se puede predecir. Dijo que si todo se supiera de antemano, vivir no sería tan interesante. Pero el filósofo indio enseñó a sus seguidores a no tener miedo a la vida y al riesgo, ya que sin riesgo no hay crecimiento espiritual.
La soledad la consideraba una buena forma de sentirse feliz. Ella, según Osho, ayudó a sentir su unidad con poderes superiores, a darse cuenta de su fuerza y utilidad espiritual. Entonces la comunicación con otras personas se volverá más fructífera y traerá placer.