La lucha por la igualdad de derechos de hombres y mujeres en el escenario mundial aún no ha terminado. El político británico Justin Greening argumenta convincentemente que las mujeres pueden trabajar mejor que los hombres. Ocupó cargos ministeriales en el gobierno del Reino Unido.
Condiciones de inicio
Justina Greening comenzó su carrera como figura pública como secretaria en el municipio del condado de Putney. Después de algún tiempo, fue elegida por la legislatura de la ciudad de los tres distritos de Putney, Rohampton y Southfield, que se consideran un suburbio de Londres. Justina cumplió fielmente sus deberes y mantuvo contactos regulares con los residentes locales.
El futuro activista por los derechos de los votantes nació el 30 de abril de 1969 en una familia británica común. Los padres vivían en el pequeño pueblo de Rotherham. Padre sirvió en la policía. Madre trabajaba como vendedora en una papelería. Una niña desde temprana edad estaba preparada para una vida independiente. Justin recibió educación primaria en una escuela integral local donde estudiaron niños de grupos de bajos ingresos. Para el éxito académico, recibió una beca estatal y entró en la Universidad de Southampton.
Actividad política
Como estudiante, Justin se unió al partido conservador. Después de graduarse de la universidad, se dedicó por completo al trabajo de fiesta. Ella tuvo que resolver una variedad de problemas y problemas que los votantes abordaron. Greening vio y supo cómo viven los contribuyentes comunes. Al mismo tiempo, no rehuyó las acaloradas discusiones sobre temas de actualidad. En 2005, ganó las elecciones para la Cámara de los Comunes. Este evento hizo famoso a Justin porque su rival era miembro del Partido Laborista con una fortuna millonaria. El mandato adjunto le permitió actuar a mayor escala.
En el otoño de 2011, Greening fue nombrado Ministro de Transporte. Tuvo que organizar los flujos de tráfico en Londres y otras ciudades donde se celebraron los Juegos Olímpicos de 2012. Después de resolver con éxito la tarea, Justin asumió el cargo de Ministro de Desarrollo Internacional. Al mismo tiempo, los analistas políticos señalan que ella logró el mayor éxito como Ministra de Educación. Greening elogió el sistema educativo que operaba en la Unión Soviética. Y no solo lo aprecio, sino que también lo aplicó en gran medida en el Reino Unido.