Los que son derrotados en las guerras de información sobreviven, pero desaparecen del espacio de los medios. Vernika Borovik-Khilchevskaya es periodista profesional. Durante varios años trabajó en la explotación de Top Secret.
Infancia feliz
Desde la antigüedad, en una sociedad civilizada, se ha desarrollado el mecanismo de las relaciones entre padres e hijos. Esta regla está representada gráficamente por el modelo de la familia patriarcal. La generación anterior educa adecuadamente a la descendencia y les brinda conocimientos fundamentales. En este paradigma, Veronika Borovik-Khilcheskaya creció y se desarrolló. La niña nació el 30 de septiembre de 1964 en una familia de élite soviética. Los padres en ese momento vivían en la ciudad de Kiev. Padre ocupó un puesto responsable en la estructura del Ministerio de Asuntos Exteriores de la URSS. Madre trabajaba como traductora.
Desde las uñas jóvenes, el niño creció y se desarrolló rodeado de atención y cuidado. Debido a los detalles de su trabajo, Yuri Mikhailovich Khilchevsky periódicamente realizaba viajes de negocios a largo plazo en el extranjero. Veronica vivió en los Estados Unidos durante varios años. Fue en este país donde conoció a su esposo Artem Borovik. Conocido ocurrió en la infancia. Veronika se graduó de una escuela con un estudio en profundidad de idiomas extranjeros en Moscú. El consejo familiar decidió que la niña recibirá educación en la facultad de periodismo internacional de MGIMO.
Actividad profesional
En 1988, Khilchevskaya recibió un diploma y llegó a trabajar en la oficina editorial de la revista "New Time". En este momento, las reformas irreversibles ya habían comenzado en la Unión Soviética, lo que llevó al colapso del país. Después de los acontecimientos de agosto de 1991, Veronica fue invitada al canal de televisión estadounidense NBC. Aquí se estaba preparando para transmitir noticias desde Moscú y otras regiones de Rusia. La experiencia que ganó Khilchevskaya en Nueva York fue útil para ella posteriormente. Tres años después, regresó a Moscú, donde comenzó a transmitir temas políticos en la Compañía Estatal de Televisión y Radio de toda Rusia.
La carrera profesional de Veronica se ha desarrollado sin problemas. En 1997, conoció a su amigo de la infancia Artyom Borovik, quien trabajó en la nueva pero ya popular edición de Top Secret. Una conversación completa tuvo lugar entre los "viejos" conocidos. Después de algunas dudas, Veronica decidió unirse a Artem. Después de un tiempo, Khilchevskaya asumió el cargo de director comercial de la explotación. La situación en el país era complicada e incluso los expertos informados no siempre podían entender la esencia de lo que estaba sucediendo. En 2000, Artem Borovik fue trágicamente asesinado. Unos años más tarde, la publicación dejó de existir.