Durante más de medio siglo, la humanidad ha estado explorando el espacio cómico. Los resultados pueden parecer modestos. Sin embargo, detrás de cada paso se encuentra el trabajo colosal de un gran equipo. Astronauta Oleg Kononenko, que realizó cuatro vuelos a la órbita terrestre.
Condiciones de inicio
Los niños nacidos en los años 60, casi todos soñaban con convertirse en astronautas. Oleg Dmitrievich Kononenko nació el 21 de junio de 1964 en una familia soviética ordinaria. Los padres en ese momento vivían en la ciudad de Chardzhou. Mi padre trabajaba como conductor. Madre es recolectora en un aeropuerto local. El niño creció activo e inquisitivo. Le gustaban los deportes, participaba en eventos sociales. Paralelamente a la escuela secundaria se graduó de arte.
A Oleg le encantaban los juegos de equipo, y en décimo grado se le asignó la primera categoría en voleibol. Habiendo recibido un certificado de madurez, ingresó al Instituto de Aviación de Jarkov. En sus días de estudiante, Kononenko no cambió sus hábitos. Jugó voleibol para el equipo nacional del instituto. Durante tres años fue catalogado como el director del museo de cosmonáutica de la facultad. En 1988 recibió educación superior y calificación de ingeniero mecánico. Por distribución, llegó a trabajar en una oficina de diseño especializada de la ciudad de Kuibyshev.
Fase preparatoria
En una oficina secreta de diseño, un joven especialista se dedicaba al desarrollo de sistemas de suministro de energía para naves espaciales. Cada ingeniero intentó contribuir a la creación de satélites y estaciones orbitales. Kononenko hizo varias propuestas de racionalización que fueron aprobadas para su uso. Pero la creatividad técnica en la Tierra no reemplaza los sistemas de prueba en el espacio. Dada esta circunstancia, Oleg presentó una solicitud de admisión al escuadrón cosmonauta.
Después de considerar la solicitud y las diversas inspecciones, se concedió la solicitud del ingeniero. El estado de salud del candidato se verificó cuidadosamente. Desde 1998, comenzaron los preparativos para el vuelo. Es importante tener en cuenta que el programa de capacitación está diseñado para varios años. De tal manera que tres meses después de la inscripción, una persona fue enviada al espacio no sucede. Kononenko no solo realizó todos los procedimientos necesarios, sino que también continuó trabajando en proyectos en curso.