Todos los que vieron la película "Ice" (2017) son conscientes de que la actriz Aglaya Tarasova, que interpretó el papel del patinador Nadezhda, no pudo haber realizado todos los trucos y, en general, patinó de manera tan hermosa y segura. Sin embargo, no todos saben que su suplente fue la famosa patinadora Katarina Herboldt.
No solo interpretó figuras complejas para Aglaya, sino que también le enseñó a la actriz a patinar con confianza durante varios meses. Por lo tanto, su contribución es que esta película se ha vuelto tan popular.
La patinadora se hizo famosa después de que comenzó a actuar en varios espectáculos. Ella brilló en "Ruslan and Ludmila" de Tatyana Navka, "The Snow King" de Evgeni Plushenko y otros. Recientemente, los patinadores se han convertido en invitados frecuentes durante las actuaciones de las estrellas, y Katarina no fue la excepción: adornaba los conciertos de Elena Vaenga, Svetlana Loboda.
Herboldt incluso probó suerte con los comentarios deportivos: le contó a la audiencia sobre los torneos de patinaje artístico.
Biografia
Katarina Alexandrovna Herboldt nació en Leningrado en 1989. Cuando era niña, llegó a la pista y se enamoró del patinaje artístico. Se las arregló para combinar sus estudios en la escuela y la formación, porque desde la infancia tenía mucho propósito.
Posteriormente, esta calidad la ayudó a convertirse en una Maestra de Deportes de la clase internacional y Campeona de Rusia entre los juniors.
Carrera de patinador
Al principio, Katarina actuó en patinaje único, y luego decidió cambiar a dobles. Desde 2010, patinó con su compañero Alexander Enbert, y esto continuó hasta 2014. Una vez en el entrenamiento, resultó gravemente herida y se perdió una temporada completa debido a esto. Su pareja no quería esperar a la recuperación y comenzó a bailar con otra pareja. Este fue un gran éxito para el patinador.
Después de la restauración, Herboldt anunció que ahora actuaría con el francés Jean-Sieber. Sin embargo, después de que la pareja bailara en el programa "The Snow King", Giber se retiró. Katarina tenía grandes esperanzas para esta unión: fue como un segundo viento para ella, pero sus sueños no se hicieron realidad.
Después de eso, Katarina todavía hizo intentos de entrenamiento con otros compañeros, pero luego decidió terminar su carrera y hacer otra cosa.
Mientras pensaba a qué esfera de actividad dirigir su atención, Svetlana Sokolovskaya, quien era su mentor, intervino en su destino. Ella persuadió a Katarina para ir a un trabajo de entrenamiento. Entonces la patinadora se encontró en Moscú y se convirtió en entrenadora. Al principio, dudaba de haber elegido la profesión adecuada para ella, pero luego se dio cuenta de que esto era exactamente lo que quería: enseñar a los niños a patinar, dar sus primeros pasos en el patinaje artístico. Y quién sabe, ¿tal vez los futuros campeones olímpicos ya estén patinando entre ellos ahora? Después de todo, esta es una verdadera creatividad: educar a un buen patinador.