Dignidad es la palabra que se usa para denotar la autoestima, así como el respeto por las personas que los rodean. En otras palabras, la dignidad es el valor de la vida humana.
Y el concepto de un nivel de vida decente significa qué tan bien vive una persona.
Un nivel de vida decente es la satisfacción de las diferentes necesidades humanas.
En primer lugar, la gente quiere comer, beber y vivir normalmente en una casa o apartamento hermoso y confortable.
En segundo lugar, una persona siente la necesidad de amor, autodesarrollo, conocimiento, reconocimiento del mérito de la sociedad. Quiere tener una familia, criar hijos, llevarlos a buenos jardines de infancia, darles una educación de calidad.
Satisfacer todas estas necesidades significa que una persona tiene un nivel de vida decente.
Lo que compensa el precio de un estilo de vida decente.
El costo de vida en cada país se basa en los costos asociados con los costos nacionales, así como con las necesidades promedio de cada persona.
Cuanto más frío sea el clima en el país, más dinero tendrá que gastar en calentar casas, criar ganado, cultivar verduras y frutas. Debido a esto, el costo de los servicios públicos y los alimentos es más alto que en un país con un clima más templado y cálido.
El nivel de ingresos estatales también afecta la calidad de la vida humana. Por ejemplo, cuanto más vende el estado petróleo, gas y otros productos a otros países, más puede gastar dinero en salarios, programas sociales y subsidios. Por supuesto, si al mismo tiempo gasta razonablemente fondos presupuestarios y no los saquea.
El nivel material de la población está creciendo, y las personas están comenzando a gastar más dinero tanto en necesidades básicas como en entretenimiento. Y cuanto más estén dispuestos a pagar por un nivel de vida decente, mayor será la calidad de la vivienda, los bienes y los servicios. En este caso, el fabricante aumenta el costo de su producción y, por lo tanto, aumenta los precios de venta.