El periodista, médico y político Jean Paul Marat, por voluntad del destino, se convirtió en uno de los líderes de la Revolución Francesa. Su personalidad es controvertida: algunos son muy positivos sobre su trabajo, otros lo consideran un verdugo cruel, una persona desagradable e indigna. Pero pocas personas no están de acuerdo con el hecho de que Jean-Paul Marat es una figura grande y significativa para la historia de Francia.
Jean Paul Marat: errante y médico
Marat nació en mayo de 1743 en la ciudad de Budri (ahora es el cantón de Neuchatel en Suiza) en la familia de un médico. Perdió a sus padres bastante temprano, y a la edad de dieciséis años dejó su tierra natal. A partir de ese momento, Marat tuvo que cuidarse solo.
Durante dos años fue educador en la casa de un comerciante en el Burdeos francés. Durante los siguientes diez años, vivió en Holanda e Inglaterra, moviéndose de un lugar a otro y ganando dinero con práctica médica y clases particulares. Al mismo tiempo, Jean Paul mejoró constantemente su educación.
Además, durante estos años, Marat creó una serie de trabajos sobre medicina y, por lo tanto, se convirtió en un número significativo de enemigos. Incluso entonces se distinguió por la pasión del tono, la capacidad de atacar a las autoridades y derribarlos.
En 1775, la Universidad de Edimburgo otorgó a Marat el título de Doctor en Medicina. Y desde 1779 hasta 1787, Marat se desempeñó como médico en el estado del conde d'Artois en Francia.
Periodismo y actividades políticas
El primer libro político de Marat "Las cadenas de la esclavitud" se publicó en 1774. En él, denunció la tiranía y cantó los valores de libertad e igualdad. Seis años más tarde, en 1780, Marat compuso un tratado para el concurso titulado "Plan de Derecho Penal". En este trabajo, abogó por la mitigación del castigo por ciertos delitos (el revolucionario creía que el crimen en muchos casos es el resultado de la pobreza y la pobreza).
En los años ochenta, Marat fue muy consistente en proteger los intereses de los pobres. Y en 1789, cuando estalló una revolución en Francia, Marat decidió publicar el periódico "Amigo del pueblo". Y esto resultó ser un hito importante en su carrera. El periódico convirtió a Marat en una figura de culto. El apodo "amigo de la gente" se le pegó.
Se permitió criticar a los más altos funcionarios por su mala conducta. En los textos publicados en las páginas de los periódicos, los reyes, ministros y miembros de la Asamblea Nacional lo entendieron. El "amigo del pueblo" estaba continuamente bajo la presión de las estructuras estatales. Pero siempre, cuando Marat fue convocado a la corte, se las arregló hábilmente. Su periódico tuvo una popularidad fantástica y contribuyó en gran medida a la propagación de protestas en París.
Con cada nuevo número de "Friend of the People", creció el número de simpatizantes de Marat. Y esto lo obligó a ir a una posición ilegal. En el apogeo de la revolución, a fines de 1791, Marat incluso se fue a Gran Bretaña. Pero en las tranquilas calles de Londres, el revolucionario estaba incómodo: estaba acostumbrado a estar a la vanguardia. Después de una breve ausencia, el insumergible Marat regresó a París. Esto sucedió en abril de 1792.