No existe una definición universal de derecho en la ciencia, pero el significado general de este término es claro para todos. En una forma generalizada, la ley puede representarse como un conjunto de ciertas reglas que rigen las relaciones sociales. Por lo tanto, las razones para el surgimiento de la ley deben buscarse en la estructura misma de la sociedad.
El proceso de surgimiento y formación de la ley tuvo lugar en estrecha relación con el proceso de surgimiento y formación de la sociedad misma. La formación del pensamiento humano, la conciencia de una persona de su propia individualidad y singularidad, la acumulación de conocimiento sobre el mundo externo e interno, todo esto condujo a una complicación significativa de la estructura de las relaciones entre las personas. Y para regular estas relaciones, se necesitaba un nuevo mecanismo social que no tenga análogos en el reino animal. Este mecanismo se ha convertido en ley. Se cree que la moralidad fue la precursora de la ley. En la visión moderna, la moral se define como un conjunto de normas y reglas adoptadas en la sociedad y que regulan las acciones humanas. El conocimiento de los conceptos de bien, mal, conciencia, honor, justicia, deber, misericordia y otros aumentó significativamente la vitalidad de toda la sociedad. Fue en este período de la historia que podemos decir que la sociedad humana ha dejado de ser una manada. Un paso importante fue la realización del derecho principal de cada persona: el derecho a la vida, sin el cual todos los demás derechos pierden todo significado. Pero la moralidad cubría solo el componente moral de la vida pública, siendo solo uno de los mecanismos de control público, pero no de gestión. La gestión efectiva requería normas establecidas no por la sociedad misma, sino por sus líderes. Y las primeras fuentes de tales normas fueron las costumbres. Por costumbre se entiende una acción arraigada en la sociedad a través de repetidas repeticiones. La primera forma de costumbre registrada históricamente fue el tabú. El tabú era una prohibición impuesta por el sacerdote y vinculante para cualquier miembro de la comunidad. El primer tabú universalmente reconocido es la prohibición del incesto, que ha mejorado significativamente el acervo genético humano. Los líderes y los sacerdotes poseían poder y, por lo tanto, la capacidad de establecer costumbres. La regla, inicialmente expresada en la costumbre, luego se convirtió en la Ley. Una complicación adicional de la estructura social también condujo a la complicación del aparato legal de la sociedad. Nuevas instituciones públicas y legales comenzaron a aparecer y desarrollarse, cuya evolución continúa hasta nuestros días. Habiendo surgido como un medio para regular las relaciones sociales y humanas, el derecho se ha convertido en una parte integral de la existencia de la sociedad.