El plan estratégico de Schlieffen, que implicaba una victoria rápida para Alemania en la Primera Guerra Mundial, no se implementó. Pero aún continúa excitando las mentes de los historiadores militares, porque este plan era inusualmente arriesgado e interesante.
La mayoría de los historiadores militares se inclinan por la idea de que si el plan del jefe del estado mayor alemán Alfred von Schlieffen se realizara, la Primera Guerra Mundial podría ir en un escenario completamente diferente. Pero en 1906, el estratega alemán fue removido de su cargo y sus seguidores tenían miedo de implementar la idea de Schlieffen.
Plan de guerra relámpago
A principios del siglo pasado, Alemania comenzó a planear una gran guerra. Esto se debió al hecho de que Francia, derrotada varias décadas antes, tramó claramente planes de venganza militar. La dirección alemana no temía particularmente la amenaza francesa. Pero en el este, Rusia estaba ganando poder económico y militar, que era un aliado de la Tercera República. Para Alemania, surgió el peligro real de una guerra en dos frentes. Consciente de esto, Kaiser Wilhelm ordenó a von Schlieffen desarrollar un plan para una guerra victoriosa en estas condiciones.
Y Schliffen, en poco tiempo, creó tal plan. Según su idea, Alemania comenzaría la primera guerra contra Francia, concentrando el 90% de todas sus fuerzas armadas en esta dirección. Por otra parte, se suponía que esta guerra iba a la velocidad del rayo. Solo se asignaron 39 días para la captura de París. En la victoria final - 42.
Se suponía que Rusia no podría movilizarse en tan poco tiempo. Las tropas alemanas después de la victoria sobre Francia serán transferidas a la frontera con Rusia. Kaiser Wilhelm aprobó el plan, diciendo la famosa frase: "Almorzaremos en París y cenaremos en San Petersburgo".