Todos los días una persona recibe emociones. Si son agradables, se llenan de energía y dan satisfacción, y las negativas se pueden resolver durante mucho tiempo. La emocionalidad está presente en cada persona, pero en diferentes cantidades. Y puede manifestarse de diferentes maneras.
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Manual de instrucciones
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El nivel de emocionalidad de una persona depende de su sensibilidad. Haga al interlocutor cualquier pregunta que requiera una descripción de las impresiones de un evento en particular. Si sus ojos se "iluminan", aparecerán gestos violentos y expresiones faciales, antes de que usted sea una persona emocional. Pero al ser demasiado dependiente de sus propias experiencias, puede reclamar una mayor atención del interlocutor, que tendrá que escuchar sus descripciones coloridas. Este es uno de esos raros casos en los que se le "permite" escuchar, pero no escuchar. Dado que una conversación con una persona emocional es a menudo un monólogo, de vez en cuando asiente y "diluya" con sus comentarios "¡Guau!", "Sucede", "¡Bueno, bueno!".
2
Si tiene un par de narradores similares en su entorno, no dude en dejar de hablar de vez en cuando. Pero no diga que tiene "mucho que hacer hoy", sino mencione un deber específico que debe cumplirse. Como persona sensible, el interlocutor debe "entrar en una posición". Pídales que no lo llamen durante el horario comercial, porque a los jefes no les gusta esto, y en ese momento usted está a cargo de sus deberes directos. Termine la conversación con firmeza, pero no abruptamente. No olvides que debido a su emocionalidad, esas personas pueden ofenderse e incluso decir muchas cosas desagradables. Pero no están enojados por mucho tiempo: siempre puedes llamar a alguien que no ha escuchado sobre "esta historia".
3
Las personas emocionales son de mal humor, egoístas y muy vulnerables. Si están de buen humor, hágales un cumplido sincero y su estado de ánimo mejorará aún más. Y si están tensos o deprimidos, simpatice con ellos o déles una pequeña sorpresa. Pero nunca les permita controlar su propio estado de ánimo o su tiempo personal. A medida que su sonrisa rápidamente da paso a la ira y viceversa, antes de dar la noticia que es desagradable para ellos, comience diciendo sobre los esfuerzos que se han hecho para evitar el problema. Si la comunicación con personalidades superemotionales se vuelve insoportable ("vampiros energéticos", llorones, personas agresivas), minimícela reduciéndola a relaciones formales, o deténgala por completo para mantener su propio sistema nervioso.