En virtud de sus peculiaridades, un poema es una obra más difícil de analizar que la prosa. En particular, la brevedad, un mayor número de transferencias artísticas de significados, así como metáforas y otras formas, hace pensar en cualquier verso durante bastante tiempo. Al mismo tiempo, cualquier trabajo en prosa, como regla, es más comprensible para el lector, ya que el tema y la trama, así como los héroes y las ideas, están claramente dibujados en él.
Entonces, para hacer un análisis del poema, es necesario resaltar su tema. Pueden ser letras, es decir, un trabajo dedicado al amor y los sentimientos, puede ser una descripción de la naturaleza (paisaje), puede ser una filosofía (razonamiento sobre el significado del ser y otras categorías), y un poema también puede dedicarse a problemas socialmente significativos.
El siguiente punto en el análisis es la trama. Puede que no sea así si el poema está dedicado a los sentimientos. Luego, muy probablemente, leerá una descripción de ellos, aunque es probable que se les rastree una línea de relaciones. Sin embargo, si no hay eventos en el poema, el enfoque en la trama es opcional.
Para hacer un análisis de un poema, es importante determinar su tamaño. Quizás esta sea la parte más difícil para aquellos que no han estudiado la teoría de la literatura. Los tamaños más comunes son yámbico, troqueal, dactil, anfibrach y anapaest. Sus diferencias están en el número de sílabas por línea, así como en la colocación del énfasis, que es el ritmo del verso en su conjunto.
La frecuencia de la rima también puede diferir, lo que debe indicarse al analizar el verso. Puede ser emparejado (cuando dos líneas riman en fila), anillo (rima 1 y 4 líneas, así como 2da y 3ra) y cruzado (rima de líneas pares e impares).
Al analizar un poema, es importante señalar las imágenes artísticas utilizadas, las formas de expresarlas, las figuras estilísticas y los caminos. Estos incluyen epítetos, alegorías, metáforas, hipérbolas, etc. Los refuerzos y otras revoluciones también ayudan a mejorar el efecto y a poner énfasis.
Se debe tener en cuenta la dirección estilística del trabajo. Puede ser romanticismo, pero hoy en día a menudo se encuentran modernismo, futurismo y otras tendencias modernas.